Querer es el primer paso - Para dejar de fumar es muy importante informarse. Echa un vistazo a los consejos de los especialistas, a los pasos importantes del proceso, terapias alternativas y algunos alimentos que pueden ayudarle en el proceso.

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Piensa en positivo - Empieza haciendo una lista de cosas difíciles que ya has conseguido hacer y llénate de coraje. Piensa en positivo y mentalízate de que eres capaz de fumar.

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Motivos para dejar - Haz una lista de los motivos por los que quieres dejar de fumar: vivir más, mejorar la salud, por su familia, ahorrar dinero, etc. Conoces muy bien los perjuicios del tabaco y la gran cantidad de cosas que mejoran al dejarlo.

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Comparta la decisión - Pide apoyo a tus familiares y amigos, sin que te juzguen ni te supervisen. Adviérteles que puedes irritarte o perder los nervios en algún momento.

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Define un día para parar - Escoje una fecha. Prepárate mentalmente para «el primer día del resto de su vida». Puedes hasta hacer un ritual cuando te fumes el último cigarro.

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Busca un médico - Con la ayuda de especialistas, el trayecto será más fácil. Además de orientarte, podrán darte algún medicamento si fuese necesario.

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Haz ejercicio - El ejercicio, además de aliviar el estrés, ayuda al cuerpo a recuperarse de los daños causados por el tabaquismo. Empieza poco a poco con 30 o 40 min 2 o 3 veces por semana.

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Ejercicios de respiración - Existen muchas técnicas, pero respirar profundamente entre 3 y 5 min ayuda. Con los ojos cerrados, inspira por la nariz lentamente, aguanta la respiración durante unos segundos y expira lentamente por la boca.

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Utiliza la tecnología - Existen más de 40 aplicaciones que le ayudarán a dejar de fumar. Además del incentivo, marcan los logros, dan información y le acompañan en el progreso.

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Limpia la casa - Un buen consejo es retirar de la casa objetos relacionados con el tabaco como ceniceros, mecheros o paquetes antiguos.

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Evite el olor - Esto afecta a toda la casa. Se aconseja lavar sábanas, cortinas, toallas, ropa y cualquier objeto que pueda haber retenido el olor.

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Ve imágenes incentivadoras - Parece extraño, pero ver imágenes de lo que puede hacer el tabaco nos motiva para dejarlo definitivamente. Las imágenes aterradoras de pulmones y enfermedades ayudan a no encender un cigarro.

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Lleva siempre un chicle encima - Es una de las técnicas más utilizadas. Se cree que la boca y la mente en movimiento es posible obtener una sensación de bienestar que facilita el proceso.

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Acupuntura - La terapia alternativa ayuda al buen funcionamiento de los órganos, como el hígado, que sufre durante el período de abstinencia.

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Auriculoterapia - Es una acupuntura específica para las orejas. El tratamiento disminuye la ansiedad, la parte más difícil del proceso, y actúa en órganos específicos como el pulmón.

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Hipnoterapia - Según algunos estudios, un tratamiento de hipnoterapia con sesiones semanales durante 6 meses produce cambios hasta en el 70 % de los pacientes.

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Relajarse - El sufrimiento psicológico y el estrés que causa la abstinencia, sobre todo, en las primeras semanas pueden controlarse con la meditación. Tras 8 sesiones, el 56 % de los pacientes consiguieron dejarlo.

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Bebe mucha agua - Se recomienda beber, como mínimo, 2 litros al día para que las toxinas se liberen con más facilidad a través de la orina.

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Lobelia - Esta planta es muy eficaz para combatir la abstinencia a la nicotina. Normalmente, es uno de los componentes de los medicamentos que se recetan a quienes están intentando dejarlo. Una forma diferente de usarla es hacer infusiones con la planta.

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Leche y derivados - La ingestión de estos alimentos estimula la producción de serotonina, una hormona relacionada con la felicidad que inhibe la ansiedad del tacabo.

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Levadura de cerveza - Es una fuente de vitaminas del complejo B, que actúan en el sistema nervioso y controlan la ansiedad provocada por la falta de nicotina. El suplemento de levadura puede consumirse en polvo o en cápsulas.

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Jengibre - La abstinencia causa muchos síntomas como náuseas, vómitos, mareos, etc. Sin embargo, el jengibre hace que el cuerpo entre en calor y promueve la transpiracón para liberar el exceso de toxinas del cuerpo.

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Zumo de naranja - Los fumadores regulares pierden una gran cantidad de vitamina C que el cuerpo compensa con algunos elementos naturales contenidos en la nicotina. De ahí viene la importancia de consumir alimentos ricos en esta vitamina.

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Brócoli - Previene enfermedades pulmonares,sus fibras ayudan a la producción de serotonina en el momento de la digestión.

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Avena - Además de ser un fantástico alimento, también ayuda a controlar la ansiedad.

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Arroz integral - El arroz posee un alto contenido en selenio, un mineral con poder antioxidante que elimina los radicales libres provocados por el tabaco.

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Menta - El olor de la menta ayuda a evitar la tentación. Los chicles de ese sabor son recomendables, así como sus infusiones para los problemas digestivos, los gases y las náuseas.

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Hierba de San Juan - Es una hierba con flores y hojas usadas para tratar la depresión y la dependencia de la nicotina. También se vende en gotas para combatir la ansiedad.

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Pimienta de Cayena - Se puede utilizar, especialmente, cuando el deseo de fumar se vuelve incontrolable. También ayuda a aliviar y prevenir los efectos perjudiciales que el cigarro provoca en los pulmones.

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Valeriana - La infusión de raíz valeriana antes de dormir puede reducir el estrés, la ansiedad y la irritabilidad que causa la falta de nicotina.

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Ginseng - Esta planta inhibe la liberación de dopamina, que es un neurotransmisor encargado de generar sensación de placer y bienestar.

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